Me gustó escribir el post de ayer, así que hoy toca otro monográfico (¿videográfico?). En esta ocasión se trata de la música de The Legend of Zelda.

Algunos todavía recordamos aquellas maquinitas que fabricaba Nintendo, que funcionaban con pilas de botón y proporcionaban horas de entretenimiento. La de Zelda no era la mejor (en mi humilde opinión) pero por tener la doble pantalla ya molaba. Sin embargo, no sería hasta la llegada de la NES con su «The Legend of Zelda» que podríamos empezar a disfrutar de las musiquitas cuyas versiones van a popular esta entrada.

• De nuevo, empiezo con el piano [07m31s], en un video protagonizado por un personaje que demostraba ayer también su talento con este instrumento y las melodías de los videojuegos. Con todo, casi me gusta más esta interpretación al piano [10m39s], aunque sólo sea por el comienzo à la Warner Bros.
• Otro que repite es Jean Baudin [wiki*], previamente conocido como «el tío ese que toca el bajo raro». La cuestión es que vuelve con su bajo de 11 cuerdas [00m49s] para tocar el tema más conocido de la saga.
  * Me encanta este trozo de la wikipedia en francés:
  

  Jean Baudin est un bassiste connu dans le monde entier^{[réf. nécessaire]} […]

• Ya que estamos con instrumentos atípicos, metamos un poco de theremin. He aquí la versión de The Ether and Æther Experiment [01m28s].
• Por cambiar un poco de formato, vamonos a la música de cámara. Si tienes un cuarteto de cuerda y un piano [10m45s] para acompañar puedes interpretar algunas de las melodías del Ocarina of Time, aunque también puedes prescindir del piano y realizar un recital de cello [06m19s] con los temas más clásicos.
• Claro que si vas a contar con ayuda, ¿por qué no hacerlo a lo grande y montar una big band? Aunque el medley de temas de Zelda [05m10s] no está mal, prefiero la canción (sí, canción) de Mario [03m09s]. Para los viciosos que no hayan tenido suficiente con esas dos muestras, existe un video del concierto casi completo al que pertenecen:
  
  Mario & Zelda Big Band Live [01h55m52s]
• Y si todavía tenéis ganas de más, podéis buscar versiones con el ukulele. Ahí queda eso.