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Al igual que las caídas del servidor en el que se aloja este blog, hay ciertas cosas que probablemente nunca tengan una explicación. Sin embargo, siempre habrá individuos (con mucho tiempo libre) que busquen la verdad, aunque a nadie le importe realmente:

JIMI HENDRIX’s Guitar Mystery

UK’s Gazette Live reports that a group of young people in Darlington is hoping to solve the mystery of who stole Jimi Hendrix‘s guitar during a gig in the ’60s.

Hendrix‘s guitar was stolen straight after the gig at the Imperial Hotel, Darlington, on February 2, 1967, and it is thought it is still in the town.

Now a council youth service project called My Generation, which is looking at music in Darlington since the 1950s, is hoping to find out what happened to the instrument.

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He conseguido una imagen exclusiva del intrépido grupo de investigadores que intentarán resolver este misterio:

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Porque quería tocar la guitarra que estaba al otro lado:


Rondo Alla Turka: Turkish March [02m29s]

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Siguiendo un poco con el tema de ayer, los que ya hayan optado por el aparato de Apple disponen de una serie de alternativas a iTunes.

Aquí tenéis «10 alternativas a iTunes para gestionar tu iPod«. Hay que tener en cuenta que el artículo sólo enumera un conjunto limitado de aplicaciones y tiene más de 6 meses, con lo que la información podría ser complementada con más datos.

Por ejemplo, Amarok (una de las opciones de dicha lista) se puede hacer correr en Windows, aparte de compilándolo para esta plataforma. Por otro lado, sólo mencionaré EphPod y Floola a modo testimonial, para que haya constancia de que existen aún más alternativas que las diez señaladas.

Ahora tendré que tener en cuenta todo esto junto con los comentarios en el post de ayer (nuevamente, gracias mil) y decidirme de una vez. Venga, que yo puedo.

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Hace ya muuuuuucho que quiero comprarme un reproductor de mp3 y formatos similares. Aunque parece que el culto al iPod está muy extendido, hay algunas cosas que no me gustan del aparatito (véase iTunes, por ejemplo). Descartando la enorme variedad de accesorios que presenta el bicho, algunos de los cuales llegan a lo absurdo, no veo que el producto de Apple ofrezca unas ventajas técnicas claramente superiores a dispositivos de funcionalidad homóloga.

A priori, a mí me basta con que reproduzca mp3 (duh), que sea fácil de recargar y tenga una duración aceptable. Preferentemente que tenga mucha capacidad, de 80Gb para arriba, y que no requiera de software especial para gestionar/sincronizar/transferir sus contenidos. Que reproduzca vídeo de una u otra manera me importa menos, pero a nadie le amarga un dulce.

A pesar de que la tabla comparativa de característica de reproductores portátiles multimedia de la Wikipedia ofrece bastantes datos que deberían ayudarme a decidirme de una vez, preferiría conocer la experiencia de primera mano de diferentes usuarios de distintos dispositivos. Si alguien tiene algo que decir, que hable ahora… o hable más tarde.

Ah, y no me vale como razón de peso (ni a favor ni en contra) que con la caja de un iPod touch se puede hacer una cámara estenopeica :P.

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Curioseando por la colección de caricaturas de la que saqué la de ayer me topé con más de un músico. Véase este post, por ejemplo. Lo curioso es que, entre tanta figura celebérrima, la caricatura que hoy he querido utilizar no es la de un músico excesivamente venerado:

Quizás por su facilidad a la hora de moverse por lo comercial, Phil Collins ha sido/es despreciado por muchos como músico. No soy yo quién para defenderle, pero tampoco me voy a meter con alguien que compartió escenario con Ozzy y Iommi [03m55s] (por muy frívola que fuese la ocasión) o que, pasados los 50, sea capaz todavía de demostrar que se mantiene en buena forma con las baquetas [08m22s]. Claro que esto último también se aplica al otro batería del vídeo, Chester Thompson.

Lo dicho, que no será una figura terriblemente influyente en el mundo de la batería, pero al César patada en los huevos.

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