A veces tardo años en darme cuenta de las cosas. Cuando se anunciaba el estreno del cómic de Iron Maiden en Heavy Metal, no vi que todo el número 287 era el primer Music Special de la revista. Además de las historias inspiradas por distintos grupos y canciones e ilustradas por otros tantos talentos, el interior del número contenía una muestra de las obras de la galería de arte de Mario Duplantier, batería de Gojira, razón por la que su nombre figura en las portadas de la revista, de las cuales hubo tres variantes —incluyendo oportunamente una a cargo de Derek Riggs.
Llego ahora, más de dos años después, a todo esto cuando veo que el número 295 de Heavy Metal también es un especial musical, en esta ocasión con seis portadas entre las que elegir y con una historia que, por lo que he podido ver, no figura en la novela gráfica de Megadeth pero que está inspirada por una de las canciones del grupo.