Algunas personas con demasiado tiempo libre —y aún más inseguridad— se lo han tomado como una afrenta personal y lo han expresado libremente, y el señor Zombie ha usado esa misma libertad para responderles debidamente. Parece ser que estos gañanes han borrado sus comentarios, probablemente avergonzados de cómo les han cantado las cuarenta, no sin que antes otros se molestasen en capturar unas muestras: