Lemmy Kilmister murió hace algo más de cinco años. Hace unos días, uno de sus amigos recibió parte de sus cenizas, metidas en una bala:
Before his death #Lemmy asked for his ashes to be put in some bullets & handed out to his closest friends Today I received a bullet & was literally brought to tears Thank you @myMotorhead
— Rev. Riki Rachtman (@RikiRachtman) March 22, 2021
Es una idea doblemente práctica: cuando llegue el apocalipsis zombi no se verá a Lemmy convertido en uno de ellos y las balas se podrán usar para defenderse de los no-muertos. Win-win.