No soy ningún experto en cuestiones de plagio, por eso no sabría decir si hay alguna base en el caso que reportan en Gizmodo: el gerente de los bienes de Gyorgy Vukan, el compositor de la serie húngara Linda, ha presentado una denuncia por las similitudes que, según él, hay entre el tema musical de dicha serie y el de la serie de dibujos de los X-Men.
Me llama la atención del asunto es que hay dos personas identificadas como los compositores de la música de la serie de dibujos, en lugar de co-creadores: Ron Wasserman y Shuki Levy. Puede que se deba a un tema de simplificación del título atribuido, aunque en el sector audiovisual hay bastantes normas sobre lo que supone cada tipo de acreditación. Claro que esas acreditaciones a veces no valen para mucho, y si no que se lo digan a Chuck Lorre.
La página sólo tiene unos meses pero ya tiene señala unos cuantos casos más de copia-pega, incluyendo (muy a mi pesar) uno de Ed Repka copiando de Frank Frazetta.
Recuerdo que hace un par de meses leí que Iron Maiden había dejado de tocar «Hallowed Be Thy Name» por una disputa legal. La historia resumida es la siguiente: existe una canción de 1973 del grupo Beckett titulada «Life’s Shadow», escrita por Robert Barton y Brian Quinn (bajo el nombre Brian Ingham). Steve Harris era un fan de este grupo y, años más tarde, compuso «Hallowed Be Thy Name» incluyendo seis frases de la canción de Barton y Quinn. De acuerdo con los representantes de Iron Maiden, este hecho quedó cubierto hace años en un acuerdo con Robert Barton. El problema surge cuando el antiguo representante de Beckett, Barry McKay, denuncia hace unos meses esta copia en nombre de Brian Quinn. La consecuencia inmediata es que, como medida preventiva, Iron Maiden ha dejado de tocar de directo su canción probablemente más emblemática.
Desconozco como terminará este asunto, igual que no conocía la existencia del grupo Beckett y su canción, pero me ha recordado otra historia de «copia» relacionada con Iron Maiden que me descubrió hace poco Alfil, en este caso referente a su tipografía.
La fuente que decora todos los álbumes de Iron Maiden es a estas alturas tan distintiva como Eddie, protagonista del cómic de Legacy of the Beast que mencionaba el otro día, pero su uso no es tan exclusivo como puede parecer hoy en día. De hecho, existen diseños que pre-datan los primeros usos por parte del grupo británico. El que a mí me enseñaron es este:
Después de haberlo visto, esta mezcla [03m37s] resulta aún más interesante. Ahora sólo falta la mezcla de alguna canción de Iron Maiden con otra de Bruce Springsteen para acompañar la portada británica de 1975 de «Green Eyed God» de Steel Mill.
El diseño original del logo para Iron Maiden fue creado por Dennis Wilcocks con mi ayuda en el Crowes Art Studio de Rathbone Place, Londres W1, por septiembre de 1977.
La fuente original era similar a Metal Lord pero, si mi memoria no falla, unimos las letras tanto en «Iron» como en «Maiden». Recuerdo claramente el rotulado «apagado» llegando en una tira de foto para cortar y posicionar y así formar el nombre. Recuerdo incluso a Dennis encargando el tipo y trayéndolo a mi mesa. […]
Dennis fue el segundo cantante de Iron Maiden hasta donde yo sé y, de hecho, yo era su empleado porque él era el responsable del estudio en Crowes. Yo ensamblé y retoqué la rotulación que formó el logo.
La tipografía fue reconstruida en versión digital por Ray Larabie en 1996, más de veinte años después de los primeros usos que comentaba antes. Y, hablando del paso del tiempo, hace más de doce años (que se dice pronto) señalaba un caso parecido con dos grupos musicales que, además de compartir diseños similares en sus logotipos, comparten iniciales: B.G.
[…] un jurado de Los Ángeles otorgó el martes casi $7,4 millones a los herederos de Marvin Gaye, tras un juicio de dos semanas sobre si el éxito de 2013 de [Robin] Thicke «Blurred Lines» era un homenaje o constituía una infracción de los derechos de autor de la canción de 1977 de [Marvin] Gaye «Got to Give It Up.»
Como señalan en hypebot este proceso ha servido para conocer el beneficio que puede generar hoy en día uno de estos éxitos musicales. Aparte de eso, ya dije en su momento lo que opinaba de este asunto así que no me voy a repetir. Lo que sí haré será poner la otra captura del vídeo del tema de marras que no usé en su momento:
Lo único cierto en esta historia es que la similitud entre ambos se había señalado previamente y que un escenario donde Jimmy Page conociera el tema de Spirit de 1968 antes de componer “Stairway to Heaven” en 1970 resulta plausible, especialmente teniendo en cuenta que Led Zeppelin hicieron de teloneros para Spirit e incluso tocaban alguna de sus canciones en directo. La progresión y la instrumentación son similares pero me cuesta hablar de plagio en este caso, por razones muy parecidas a las que expuse sobre el caso de «Blurred Lines». Me parecen más legítimas otras reclamaciones, como la Ray Jackson sobre «Maggie May», pero habrá que ver cómo se resuelven estos asuntos.